Curiosidades
9. En cambio, en el Shinkansen no hay vagón restaurante. La gente sube con su propia comida o la compra en un carrito que pasa con frecuencia por el pasillo, y se la come en el propio vagón. El olor a comida -fuertemente especiada- es muy intenso y llama la atención de los viajeros occidentales.
1. En Tokio, para comprarte un coche tienes que demostrar antes que cuentas con un parking donde guardarlo.
2. Está prohibido fumar en las calles por el riesgo de quemar a alguien (solo puede hacerse parado y en torno a puntos marcados, en los que hay ceniceros). Sin embargo, se puede fumar en bares y restaurantes.
3. Tokio tiene el menor porcentaje de propietarios de vehículos de todo el país. Muchas empresas prohíben ir al trabajo en coche; a cambio, te pagan la tarjeta de transporte público.
4. La industria del sexo es muy potente en Japón. Esto ha dado lugar a los Muryō Annai Sho(literalmente, lugares de información gratuita), empresas que informan y gestionan sobre el ocio nocturno, desde la picardía más banal hasta el sexo duro. Puede ser la contratación de un hosto o hostess (hombre o mujer de compañía para hablar, vestir según tus fantasías o para salir a cenar acompañado /a, todo muy naïf y sin sexo o tocamientos) hasta el paseo de un hombre adulto con una adolescente vestida de colegiala o sexo en sus diversos grados legales (en Japón el sexo por dinero solo es ilegal si hay penetración).
5. La estación de Shinjuku, en el distrito financiero, es la estación con más tráfico de pasajeros del mundo: unos tres millones y medio de personas pasan cada día por sus 36 andenes, en los que se cruzan líneas de tren de largo recorrido, cercanías y metro.
6. En una ciudad como Tokio, de 13 millones de habitantes (36 si contamos el área metropolitana), la gente deja las bicicletas en la calle por la noche sin cadena, a lo sumo con un sencillo bloqueador de rueda (sí, de esos que se abren con un soplido). A la mañana siguiente, la bicicleta está en el mismo sitio donde la dejó su dueño.
7. Nunca dejes una propina; es inusual y extraño. Si la cuenta son 297 yenes y dejas en el plato los tres del cambio (dos céntimos) el camarero es capaz de seguirte hasta la calle para recordarte que has olvidado algo que es tuyo.
8. En el Shinkansen (también en el metro y en general en transportes públicos) está prohibido hablar por el móvil. Por eso puedes darte el gustazo de viajar horas y horas sin que el maleducado/a de turno te atormente con sus conversaciones voz en grito, como en el AVE español.
10. El parachoques de los coches es solo de decoración. Nadie aparca tan ajustado como para poder rozar a los vehículos contiguos. O queda más de medio metro entre uno y otro… o no se aparca.

Historia
La historia de Japón se ha modelado en gran parte por su aislamiento como isla-nación y por su proximidad al colosal continente asiático (y en particular, por sus vecinos, Corea y China). En las épocas de apertura ha sido permeable a las diversas ideas y culturas que han llegado a sus orillas; en las de cerrazón, se ha dedicado a incubar su particular manera de hacer las cosas. Como la mayoría de las historias, la de Japón está llena de conflictos, crecimiento y ríos de sangre.

Antiguo Japón
Primeros pobladores
Los primeros indicios de vida humana en Japón se remontan a 30 000 años atrás, pero es posible que estuviera habitado mucho antes. Hasta el final de la última glaciación, hace unos 15 000 años, varios “puentes” de tierra unían Japón con el continente (Siberia por el norte, Corea por el oeste y quizá la actual Taiwán por el sur), por lo que el territorio resultaba accesible.
La primera cultura reconocible en emerger fue la neolítica jōmon, en el 13 000 a.C. Los historiadores les llamaron así por la cerámica con marcas que creaban, imprimiendo cuerdas retorcidas sobre vasijas hechas a mano. Tenían una vida seminómada en asentamientos a lo largo de las zonas costeras, sobre todo en el noreste de Japón.
En algún momento entre los años 800 y 300 a.C., una nueva cultura empezó a tomar forma: la yayoi (también debe su nombre a su cerámica característica, creada en un torno). Existe mucho debate sobre el origen de este cambio en la creación de la cerámica; sobre si lo introdujeron los pobladores llegados de China o Corea (o ambos). Los primeros asentamientos yayoi conocidos se descubrieron en el norte de Kyūshū, cerca de la península coreana, y el cambio cultural se propagó desde allí.
Los yayoi introdujeron técnicas de cultivo húmedo para el arroz; algo que supuso un gran cambio; no solo porque exigía asentamientos más estables, también porque la práctica del cultivo intensivo se adaptaba mejor a las tierras bajas, lo cual favoreció el crecimiento de la población en las cuencas fértiles. También introdujeron el hierro y el bronce. Hacia el s. I d.C., los yayoi se habían extendido hasta el centro de Honshū; el norte se siguió considerando territorio jōmon hasta el s. VIII (Hokkaidō y Okinawa no existían entonces).
El auge del clan Yamato
Los asentamientos agrícolas delimitaron territorios y fronteras. Según fuentes chinas, hacia el final del s. III d.C. existían más de 100 reinos en Japón, y algunos de ellos estaban gobernados por una reina llamada Himiko. El lugar exacto de su reino no está claro; algunos historiadores afirman que se hallaba en el noroeste de Kyūshū, pero una mayoría considerable señala la región de Nara. Su territorio era conocido como Yamatai (posiblemente el nombre “Yamato” proceda de ahí). Los chinos llamaban a este estado naciente Wa, y consideraban a Himiko como su soberana, quien, por medio de tributos, reconocía su lealtad al emperador de China.
Al mismo tiempo se extendía una práctica por la cual los líderes tribales eran enterrados en túmulos funerarios (kofun), cuya forma y tamaño iban relacionados con su estatus, lo cual prueba la existencia de una sociedad cada vez más jerarquizada y el auge de una cultura basada en lo material (tras su muerte, en el año 248, Himiko fue enterrada en una enorme tumba, junto con 100 esclavos sacrificados). Este desarrollo derivó en el comienzo de lo que los historiadores denominan el período Kofun, o Yamato, durante el cual el poder administrativo y militar empezó a fusionarse alrededor del clan Yamato, en la cuenca de Kansai.
Bajo el reino de la emperatriz Suiko (592-628), y su poderoso príncipe regente Shōtoku (573-620), se promulgaron reformas administrativas inspiradas por la dinastía china Tang y dirigidas a consolidar el poder a través de impuestos, la distribución regulada del territorio y los rangos oficiales.
El príncipe Shōtoku tuvo un papel instrumental en la temprana propagación del budismo (que llegó a Japón por medio de la influencia coreana), fundando varios templos en la zona de Kansai.
La era de los cortesanos
Creación de la capital
Antes del año 694, la corte Yamato tenía la costumbre de trasladar y construir un palacio nuevo cada vez que se elegía un nuevo emperador o emperatriz (30 o 40, según se cuente). La emperatriz Jito fue la primera que ordenó la construcción de una capital más permanente, basada en el modelo chino de una red ordenada. Solo duró 16 años, pero la idea cuajó, y en el año 710 se establecía una nueva capital en Nara (Heijō-kyō).
Por aquel entonces, el budismo prosperaba; como prueba, destaca la construcción del templo Tōdai-ji (745), que todavía sigue en pie y alberga un enorme Buda de bronce. Es el edificio de madera más grande del mundo (y uno de los más antiguos). Los kofun habían pasado de moda en la capital (aunque seguían erigiéndose en los territorios de las afueras) y las tumbas se decoraban con motivos budistas.
El emperador Kammu [781-806] decidió reubicar la capital en el 784, quizá a raíz de una sucesión de desastres ocurridos tras el traslado a Nara, entre ellos una epidemia de viruela que acabó casi con un tercio de la población entre los años 735 y 737. En el 794 la capital se trasladó a la vecina Kioto (Heian-kyō), que ejerció como tal más de 1000 años (aunque no siempre fuera el centro verdadero del poder).
Auge y caída de la corte Heian
En los siglos siguientes, la vida cortesana en Kioto alcanzó el culmen de su refinamiento y protocolo, como refleja la famosa novela Historia de Genji, escrita por la cortesana Murasaki Shikibu hacia el 1004, donde se muestra a los cortesanos entregados a diversiones como adivinar las flores por su aroma, construir extravagancias arquitectónicas y no escatimar gastos en lo último en lujo. Aquel era un mundo que estimulaba la estética con conceptos como el mono no aware (lo agridulce de las cosas) y la okashisa (incongruencia que sorprende y agrada), que han subsistido hasta hoy, pero también era un mundo cada vez más alejado de la realidad. Manipulado durante siglos por la familia Fujiwara, políticamente muy poderosa, el trono imperial perdía autoridad.
Mientras los nobles se engolfaban en placeres e intrigas cortesanos, en las provincias surgían poderosas fuerzas militares acaudilladas casi siempre por nobles de alcurnia menor, enviados con frecuencia en nombre de la alta nobleza para desempeñar tareas ‘tediosas’. Algunos de ellos eran parientes lejanos de la familia imperial, apartados de la línea de sucesión –se les daban nombres nuevos y eran desterrados a clanes provinciales– y hostiles a la corte. Entre sus sirvientes figuraban diestros guerreros conocidos como samuráis (literalmente, “sirvientes”).
Los dos clanes principales de la baja nobleza descastada, los Minamoto (o Genji) y los Taira (Heike), eran enemigos. En 1156 se les encargó que apoyaran a sendas facciones rivales que aspiraban a mandar en la familia Fujiwara, pero esto pasó pronto a un segundo plano cuando se entabló una contienda entre los Minamoto y los Taira.
Se impusieron los Taira, al mando de Kiyomori (1118-1181), que se estableció en la capital y, en los 20 años siguientes, se entregó a sus muchos vicios. En 1180 entronizó a su nieto Antoku, de 2 años. Cuando un pretendiente rival recabó la ayuda de la familia Minamoto, que se había reagrupado, su líder, Yoritomo (1147-1199), no lo dudó. Kiyomori y el pretendiente murieron poco después, pero Yoritomo y su hermanastro Yoshitsune (1159-1189) continuaron con la guerra contra los Taira. En 1185 Kioto había caído y los Taira fueron perseguidos hasta el extremo occidental de Honshū. Tras una batalla naval en la que vencieron los Minamoto, la viuda de Kiyomori se arrojó al mar con su nieto Antoku (que ya tenía 7 años). Con Minamoto Yoritomo como hombre más poderoso de Japón, empezó un período de dominio militar.

La era de los guerreros
El primer sogún
Yoritomo no aspiraba a convertirse en emperador, pero quería que el nuevo emperador le otorgara el título de sogún (generalísimo), lo que paso en 1192. Mantuvo varias oficinas e instituciones, y creó su sede en su territorio natal, Kamakura (cerca de la actual Tokio), en lugar de en Kioto. Su sogunato fue conocido en japonés como bakufu, que hace referencia al cuartel general de campaña de un general de campo. Aunque, en teoría, Yoritomo representaba el brazo militar del gobierno del emperador, en la práctica quien mandaba en el gobierno era él. El baufuku de Kamakura estableció un sistema feudal –que perduraría casi 700 años como institución– basado en la lealtad entre señores y vasallos.
Cuando Yoritomo murió en 1199 (tras caerse de su caballo en circunstancias sospechosas), su hijo le sucedió en el título de sogún. Sin embargo, su viuda, Masako (1157-1225), era miembro del clan Hōjō y una figura formidable, y acumuló un poder muy significativo el resto de su vida (a pesar de afeitarse la cabeza y tomar votos religiosos tras la muerte de su marido). Su padre ejerció de regente, un título que los Hōjō conservarían hasta que las intrigas y las disputas internas acabaron con la vida del último heredero Minamoto, momento que los Hōjō aprovecharon para reclamar abiertamente el sogunato.

La isla de Okinawa
la prefectura de Okinawa(antes llamada el reino de Ryukyus)fue el sitio de origen del karate.
El karate es el arte marcial más practicada de Japón.
A pesar de ello, la isla de Okinawa no es muy conocida.
He de comentar lo decepcionante que es que el karate no vaya a ser un deporte olímpico en los Juegos Olímpicos de Paris, aun así, felicidades a los de break dance ;).
Nadie sabe cuando se practico karate por primera vez sin embargo, si sabemos como fue inventado.
Prohibieron la utilización de las armas, lo cual permitió el desarrollo del karate.
Hasta el siglo XV Ryukyus estaba dividido en tres reinos: Chuzan, Nazan y Hokuzan, cada uno luchando por su reino.
Se juntaron los tres reinos bajo el mandato de Sho Hashi.
La prohibición de las armas ayudo a la historia del karate que significa "mano vacía " en japones "空手".

Cultura:
La cultura nipona o japonesa es muy diferente a la
de otros países occidentales. Las relaciones entre
personas se basan en el “honor” y en el sentido del
deber.
La gastronomía japonesa es muy sofisticada, su
ingrediente principal es el arroz, siempre presente
junto a un poco de pescado o verduras.
El Kimono o la Yukata son los atuendos
tradicionales, confeccionados con seda natural y
como todo en la cultura japonesa con un significado
acorde para cada diseño y ocasión.
Los jardines tradicionales japoneses son también
una forma de expresión propia del país.
El deporte más practicado en la isla es el sumo,
procedente de los antiguos guerreros japoneses que
luchaban para entretener a los dioses.
Ya sois 300 geographiers los que nos habéis visto y nos gustaría premiaros con este cartel que hemos hecho:
Adivinanza
¿Qué gigante tiene
en lar tinerfeño,
entrañas de fuego
y capas de nieve?

La isla de Okinawa
la prefectura de Okinawa(antes llamada el reino de Ryukyus)fue el sitio de origen del karate.
El karate es el arte marcial más practicada de Japón.
A pesar de ello, la isla de Okinawa no es muy conocida.
He de comentar lo decepcionante que es que el karate no vaya a ser un deporte olímpico en los Juegos Olímpicos de Paris, aun así, felicidades a los de break dance ;).
Nadie sabe cuando se practico karate por primera vez sin embargo, si sabemos como fue inventado.
Prohibieron la utilización de las armas, lo cual permitió el desarrollo del karate.
Hasta el siglo XV Ryukyus estaba dividido en tres reinos: Chuzan, Nazan y Hokuzan, cada uno luchando por su reino.
Se juntaron los tres reinos bajo el mandato de Sho Hashi.
La prohibición de las armas ayudo a la historia del karate que significa "mano vacía " en japones "空手".

Cultura:
La cultura nipona o japonesa es muy diferente a la
de otros países occidentales. Las relaciones entre
personas se basan en el “honor” y en el sentido del
deber.
La gastronomía japonesa es muy sofisticada, su
ingrediente principal es el arroz, siempre presente
junto a un poco de pescado o verduras.
El Kimono o la Yukata son los atuendos
tradicionales, confeccionados con seda natural y
como todo en la cultura japonesa con un significado
acorde para cada diseño y ocasión.
Los jardines tradicionales japoneses son también
una forma de expresión propia del país.
El deporte más practicado en la isla es el sumo,
procedente de los antiguos guerreros japoneses que
luchaban para entretener a los dioses.
Ya sois 300 geographiers los que nos habéis visto y nos gustaría premiaros con este cartel que hemos hecho:
Adivinanza
¿Qué gigante tiene
en lar tinerfeño,
entrañas de fuego
y capas de nieve?
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Etiquetas:
cultura de japón.
curiosidades de japón
historia de japón
historia del karate
isla de okinawa
japon
japón
karate isla de okinagua
okinawa
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Comentarios